La presa de El Atazar es uno de los ejemplos más importantes de presa de bóveda en España, con 134 m de altura sobre cimientos y 484 m de longitud en coronación.
Se encuentra en el río Lozoya, en la cuenca hidrográfica del río Tajo y puede almacenar hasta el 46% del agua para el abastecimiento de más de 6 millones de personas en la Comunidad Autónoma de Madrid.
El embalse de Puentes, en Lorca (Murcia) ha contado con hasta cuatro presas a lo largo de trescientos cincuenta años, siendo, por sus vicisitudes, una de las más estudiadas por los ingenieros de presas a lo largo de la historia.
El embalse de Talave en el río Mundo, afluente del río Segura, se encuentra en el municipio de Liétor (Albacete) España.
Su principal misión es la de recibir las aguas del trasvase Tajo – Segura y regular su distribución al resto de la cuenca del Segura.
Se trata de una presa de gravedad de mampostería con mortero de cal.
El Acueducto del Trasvase Tajo – Segura (España) se construyó para aportar aguas del río Tajo a la cuenca del río Segura, para el abastecimiento a la población y regadíos, en las provincias de Murcia, Alicante y Almería, corrigiendo así el desequilibrio hidrológico de estas regiones.
Con una longitud de casi 270 km, su construcción fue aprobada en 1967 y el primer trasvase se aprobó en 1978, habiendo trasvasado desde entonces una media de 350 hm3 anuales.
La presa de La Fuensanta, situada en la cuenca alta del río Segura, en el sureste de España, forma junto con la presa del Cenajo, un conjunto importantísimo para la gestión hidráulica de la cuenca del Segura.
La presa del Cenajo, ubicada en la cuenca alta del río Segura, en el sureste de España, es una gran obra de ingeniería civil e hidráulica, que contribuye al desarrollo económico de la región y al control de avenidas.
